El 13 de diciembre de 2014 entró en vigor el Reglamento de Información al Consumidor (1169/2011).
El objetivo del reglamento de información al consumidor es establecer un alto nivel de protección a los consumidores, para prevenir que alimentos que puedan ser un riesgo para la
salud de determinados consumidores puedan ser consumidos por ellos. En este caso, es obligatorio informar sobre los alérgenos.
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